Para comprender mejor la oportunidad que se esconde en las crisis actuales, considere la historia de otro mundo en transición. Imagina que eres una sola célula entre los millones que componen una oruga en crecimiento. La estructura que te rodea ha estado funcionando como una máquina bien engrasada, y el mundo de las larvas se ha estado arrastrando de manera predecible. Entonces, un día, la máquina comienza a temblar y a temblar. El sistema comienza a fallar. Las células comienzan a suicidarse. Hay una sensación de oscuridad y fatalidad inminente.
Desde dentro de la población moribunda, comienza a emerger una nueva raza de células, llamada células imaginales. (también conocido como USTED!) Agrupados en comunidad, idean un plan para crear algo completamente nuevo a partir de los restos. De la descomposición surge una gran máquina voladora, una mariposa, que permite a las células sobrevivientes escapar de las cenizas y experimentar un mundo hermoso, mucho más allá de la imaginación. Aquí está lo asombroso: la oruga y la mariposa tienen exactamente el mismo ADN. Son el mismo organismo, pero reciben y responden a diferentes señales organizativas.
Ahí es donde estamos hoy. Cuando leemos el periódico y vemos las noticias de la noche, vemos que los medios informan sobre un mundo de orugas en descomposición. Y sin embargo en todas partes ustedes y otras células imaginales humanas están despertando a una nueva posibilidad. Nos estamos agrupando, comunicándonos y sintonizándonos con una nueva y coherente señal de amor.